En un camino hay un tonto. El camino se acaba pero el tonto sigue. Hoy he tenido un sueño, soñe que todo habia cambiado, que al fin las cosas podrían salir bien, decidí bajar un poquito el listón a cambio de una sonrisa, y poder sentir todo aquello que ya olvidé por los efectos del tiempo, decidí vivir ese sueño rápido, fúgaz en ese instante único y precioso en el que las cosas, joder parece que salen bien, todo estalla en pedazos y caigo en llamas estrellándome de nuevo contra el puto asfalto.

Me estoy quedando ciego, y ya no reconozco mi cuerpo, mis sentimientos hierven en un mar helado, y hace años que no lloro, creo que al final me he secado por dentro tanto que cualquier movimiento hace que los cristales que han formado la sangre de mi interiror cortan como fiel escalpelo mis entrañas, y yo no veo más que un mar de tristeza en el que se ahoga un niño, que quise ser yo.